Cada 26 de diciembre, Alto Jagüé, en el Departamento Vinchina, se llena de fe y tradición con la celebración de la Fiesta de la Virgen de Andacollo, una manifestación única de la religiosidad y cultura andina. Esta festividad reúne a cientos de devotos de Vinchina, Villa Castelli, Famatina, Villa Unión y otras localidades, quienes honran a la «chinita milagrosa» con bailes, cantos y ofrendas.
La imagen de la Virgen llegó a Jagüé en 1929, traída desde Chile por Don Juan Miranda Alarcón, cumpliendo una promesa familiar. Desde entonces, esta tradición, con raíces en el siglo XVI, se ha mantenido viva, fusionando la herencia indígena con la fe cristiana.
Los «chinos», promesantes que bailan al compás de tambores y flautas, son los custodios de esta rica tradición. Con sus galas mineras y danzas, expresan su devoción y mantienen vigente un patrimonio que conecta nuestra región con los Andes del sur.