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La ex modelo sin hogar Loni Willison fue vista hurgando en un contenedor de Los Ángeles

Willson, de 41 años, que es la exmujer de la estrella de Baywatch Jeremy Jackson, fue a través del cubo de basura y recuperó un árbol de Navidad.

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La ex modelo sin hogar Loni Willison fue vista hurgando en un contenedor de Los Ángeles – Ella colocó artículos del contenedor en su carrito antes de caminar por la calle,

Ella colocó artículos del contenedor en su carrito antes de caminar por la calle,

Llevaba un vestido floral y una gorra de béisbol con botas de leopardo en la salida.

La trágica caída de Loni se produce después de que culpara a su exmarido, Jeremy, por causar todos los problemas en su vida.

En 2010, Willison era una rubia despampanante, que solía protagonizar portadas de revistas y campañas de bañadores. Sin embargo, su carrera se desmoronó en 2014, a causa de un divorcio y diversos episodios de violencia. ¿Qué ocurrió? La estadounidense se casó, en 2012, con Jeremy Jackson, el conocido actor de Los vigilantes de la playa, quien interpretó a Hobie Buchannan, entre 1991 y 1999. Desde su boda, el matrimonio se esmeró por mostrarse como una pareja sólida… Pero la realidad en su casa era diferente.

Según algunos reportes, Willison habría sufrido «violencia doméstica» por parte de Jackson desde el inicio de su relación. Pero ella no se habría atrevido a confesar lo que estaba viviendo, hasta que -después de una gala, en 2014- se armó de valor y optó por abandonar una vida llena de lujos con el fin de escaparse de un hombre que cuando, supuestamente, consumía alcohol le agredía de manera física y psicológica. Es más, un año después, ella misma declaró que, en una ocasión, su ex le provocó una fractura en los huesos.

De acuerdo con el Daily Mail, entre 2014 y 2018 casi no se supo sobre su paradero. Pero cuando los paparazzi la volvieron a encontrar, ya no quedaba nada de su clara cabellera y sus dientes ya no brillaban como antes. Por otro lado, Willison confesó al tabloide que sufría una crisis mental, desde 2016, y que estaba convencida de que alguien -presumiblemente, su ex esposo- le enviaba una especie de «descargas eléctricas», que ella aliviaba con metanfetaminas.

Durante estos años, Loni también ha acusado a Jackson de preocupantes conductas. Ha señalado que, hace una década, él intentó estrangularla y que hacía cosas como destrozar electrodomésticos con cristales. Medios como The Sun han confirmado que, en 2014 Willison llamó a la policía, a raíz del miedo que sentía. Pero, finalmente, no presentó cargos en contra de su enamorado. «No le denuncié cuando me atacó, porque tenía miedo. Estaba en un mal momento emocional y no quería que Jeremy fuera a la cárcel», explicó en 2015.

Durante ese año y parte del 2016, la californiana trabajó como asistente en un centro de cirugías estéticas. Pero fue despedida cuando su salud mental comenzó a deteriorarse. Posteriormente, al no tener dinero para pagar las facturas, fue obligada a dejar su vivienda, por lo que se vio forzada a dormir en la calle, a hurgar en la basura y a mantenerse a salvo como podía. De hecho, mencionó al Daily Mail que no se bañaba a propósito, para «no ser atacada».

«Me roban y me quitan mis cosas, porque en la calle la gente hace lo que sea para sobrevivir. Si ven algo que tienes que les pueda ayudar, simplemente lo toman. Aquí solo sobrevive el más fuerte y mi táctica es ensuciarme más para que nadie me ataque. Cuanto más sucia, mejor para mí. Y claro, también huelo mal, porque necesito defenderme. Por eso también me corté el pelo», relató entonces, además de solicitar ayuda. «Quiero salir de la calle. Quiero una vida nueva», expresó.

En ese momento, muchos conocidos y desconocidos le ofrecieron su ayuda e incluso un techo. Aun así, ella se negó a aceptar cualquier tipo de cooperación y volvió a desaparecer, hasta el año 2020, cuando dijo a The Sun que no estaba interesada en que nadie le auxiliara, porque «se encontraba bien». «Tengo todo lo que necesito ahora mismo: comida y un lugar donde reposar. Hay gente que me da dinero aquí y allá y hay comida en los contenedores cerca de las tiendas», señaló.

Esta semana han salido a la luz fotos suyas en un estado muy preocupante: no tiene todas las piezas dentales, prácticamente no tiene pelo, parece fumar más de la cuenta y su mirada luce totalmente perdida. En las imágenes, publicadas por conocidos medios, se ve a Loni junto a un carrito de supermercado y un árbol de Navidad, con la intención de pasar las fiestas con un poco de felicidad. No obstante, nada en su postura o actitud indica que esté pasando por un buen momento.

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