El Gobierno Nacional podría reconducir el Presupuesto
El presidente Javier Milei lo presentó en el Parlamento a mediados de septiembre pero no mostró grandes avances para llegar hacia un dictamen en la Cámara de Diputados y que luego pueda pasar al Senado.
El 20 de noviembre es el día límite para que se firmen los distintos dictámenes de proyectos que se presenten; si bien en ese escenario Diputados podría tratarlo antes de que concluyan las sesiones ordinarias, no llegaría a tratarse en el Senado, salvo que el Poder Ejecutivo decida extender el período de ordinarias hasta diciembre o, en última instancia, convoque a extraordinarias, algo que parece improbable.
Un detalle sobre las sesiones extraordinarias: en caso de que finalmente el Gobierno decida que se realicen, solamente podrían tratarse los proyectos que el Gobierno nacional incluya en el temario. “No está previsto que se convoque a sesiones extraordinarias”, adelantó la semana pasada el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en una entrevista con Radio Colonia. Si no se convoca a esas sesiones o se convoca pero no se incluye la cuestión presupuestaria, Milei gobernaría hasta marzo, cuando se inauguren las nuevas sesiones, sin tener que afrontar debates sobre las partidas y pudiendo hacer uso de las facultadas extraordinarias que se le otorgaron con la aprobación de la Ley Bases.
Con declaraciones públicas, desde la Casa Rosada se mostró cierto desinterés en que se apruebe el proyecto. En más de una ocasión, Milei dijo que lo único que no negociaba del Presupuesto 2025 era el déficit cero. En caso de que el Congreso no apruebe un nuevo presupuesto, se prorrogaría por segunda vez el de 2023, algo inédito. “No tenemos una urgencia en que el Presupuesto sea aprobado. Sería un buen signo institucional que el Congreso de la Nación apruebe el que envió el Ejecutivo pero, si no lo hace, seguiremos con la prórroga del presupuesto actual”, agregó Francos en la misma nota.
Van dos semanas sin que la comisión que preside José Luis Espert se reúna. Y para la próxima, el tema sigue sin aparecer en la agenda. Esas ausencias abonan las dudas que crecen, de la mano de los dichos de voceros principalísimos del Gobierno Nacional que soslayan la importancia de contar con el presupuesto y dan crédito a la creciente sospecha de que, por primera vez en la historia, una administración prorrogará dos veces seguidas el último texto aprobado.
Llama la atención que en este análisis parcial no entre la aprobación del Presupuesto 2025, cuando el propio presidente Milei pareció darle preponderancia al ocuparse personalmente de presentarlo en el Congreso. Visto a la distancia, hoy esa puesta en escena no parece haber sido más que eso. Contrariando todas las tradiciones -a estas alturas, un clásico libertario-, poniendo al presidente en un lugar que debió haber ocupado el ministro de Economía, sin la obligación de recibir preguntas, y a este último exceptuándolo del trámite de ir a la comisión respectiva.