El exgimnasta olímpico Federico Molinari fue citado a declarar por un caso de grooming
El ex gimnasta olímpico y actual entrenador Federico Molinari deberá presentarse este jueves ante la Justicia y prestar declaraciones en el marco de una investigación que lo acusa de ciberacoso sexual infantil hacia una menor de 16 años.
Molinari, de 40 años, tendrá que testimoniar ante la Fiscalía especializada en delitos conexos a la trata de personas y pornografía infantil del Departamento Judicial de San Isidro.
La Justicia busca establecer si el ex deportista, quien recibió diploma olímpico en los JJ.OO. de Londres 2012, es culpable (o no) del delito de captación por medios tecnológicos de una menor edad con fines sexuales -arts. 45 y 131 del C.P- por el que fue denunciado el 13 de marzo de 2023.
Según la denuncia efectuada por la madre de la adolescente, el acoso sufrido por parte de la joven comenzó en 2021, cuando la gimnasta y su progenitora se mudaron de su Mendoza natal a Buenos Aires para tomar clases en la escuela de Molinari, con el objetivo de profesionalizar su formación y dedicarse, en un futuro, a la alta competencia.
A través de la red social Instagram, Molinari (esposo de la profesora -en ese momento- de la víctima), comenzó a enviarle mensajes y a reaccionar a las imágenes y videos que publicaba la
joven en sus historias.
«Cómo agitaste al público, te llevaste todas las miradas, incluso la mía», «Un fuego», «Cuando te vea en el gimnasio me voy a poner rojo como un tomate…jajaja», «Querés que te cuide un día de estos? creo que me animo», fueron algunos de los mensajes enviados por Molinari.
Incluso, en una de las conversaciones, llegó a pedirle que pase el chat al modo efímero, porque estaba «al horno».
El deportista efectuó un descargo -también a través de la red social Instagram- recién en mayo de 2023, negando las acusaciones Además, alegó: «Siempre tuve un cordial círculo con la alumna y los contactos que he mantenido con ella han estado destinados a acompañarla».
Asimismo, remarcó que el delito del cual lo acusan «no implica ningún tipo de abuso ni contacto físico con la menor, sino que hace referencia a aparentes mensajes míos inapropiados».
NA
