Social

Avanza el plan por deudas de distribuidoras con Cammesa

Al 30 de noviembre los montos sin regularizar suman $1,1 billones. Para mediados del 2025 las distribuidoras deberían firmar contratos directamente con las generadoras.

Al 30 de noviembre, la deuda no regularizada de las distribuidoras eléctricas con Cammesa, la compañía administradora del mercado mayorista, es de $1,1 billones (este año se cerraron acuerdos de pagos por $73.650 millones) y está a la firma de las autoridades un plan de pagos que establece un año de gracia y seis años de plazo en cuotas a una tasa de interés equivalente al 50% de la del Banco Nación. El objetivo es que en mayo o junio próximos el mercado de energía se maneje por contratos entre las empresas y que Cammesa vaya desapareciendo.

El plan de facilidades de pago fue analizado en los últimos días en una reunión de referentes de distintos actores del sector con Damián Sanfilippo, subsecretario de Energía. El borrador está a la firma de las autoridades del área comandada por María Tettamanti y la intención es resolver un problema que se arrastra desde hace varios años y que tuvo su origen en el atraso tarifario.

El saldo total de deuda acumulado -incluida la regularizada- es de $2,7 billones, de los que $1,152 billones corresponden a Edenor y Edesur. De ese monto, a las distribuidoras del AMBA les quedan por regularizar unos $446.000 millones ($282.000 millones son de Edenor). Las dos pagan las facturas mensuales desde que se descongelaron las tarifas.

En el ranking de las compañías que más deudas deben acordar están las cuatro distribuidoras de Buenos Aires: EDEA, Edelap, EDEN y EDES. Entre las cuatro suman $260.815 millones no regularizados. Entre todas las cooperativas eléctricas que compran directo a Cammesa el acumulado ronda los $350.000 millones.

Fuentes que participaron de la reunión sobre el plan de cancelación de deuda coincidieron en que para mediados del año que viene Energía proyecta “contractualizar la energía”. Es decir, que las distribuidoras hagan contratos directamente con las generadoras, sin presencia de intermediarios.

Con ese esquema, Cammesa reduciría al mínimo sus funciones e incluso podría desaparecer, ya que actualmente, además de administrar el suministro de energía, es la que la paga a los generadores y la cobra a los transportistas y distribuidores. La Secretaría de Energía controla el 20% del paquete accionario de la empresa, mientras que el resto es de las Asociaciones de los Agentes del Mercado Mayorista Eléctrico.

Ya en julio Energía le quitó facultades a la empresa. Mediante la resolución 150/24 le restringió la facultad de suscribir contratos a través de licitaciones públicas y le prohibió vender electricidad y comprar combustibles. De esa manera, se buscó que se concentre en el despacho de las transacciones.

El plan de pagos diseñado establece un año de gracia para el pago del capital y los intereses y 72 cuotas (seis años) para cancelar las deudas con una tasa equivalente al 50% de la vigente en el Banco Nación. El plazo previsto para que las distribuidoras adhieran será de 30 días desde que se apruebe el plan.

Para acceder, las empresas no podrán tener litigios abiertos ni deudas de 2024 sin regularizar. “Es necesario para poder ser, nuevamente, sujetos de crédito porque sino no podremos firmar contratos de compra de energía”, explicó a este diario un agente del sector.

Al igual que Edenor y Edesur, varias distribuidoras provinciales comenzaron a pagar -parcial o totalmente- las facturas mensuales de compra de energía a medida que fueron actualizándose las tarifas. El atraso tarifario impactó en el estado de la infraestructura, por lo que el gobierno libertario puso en marcha un plan de contingencia hasta 2026. Que el sistema no colapse depende, en gran parte, del clima.

Las que tienen todos sus números regularizados son EPEC (Córdoba), Energía Entre Ríos, Ejesa (Jujuy), Edeste SA (Mendoza), EMSA (Misiones), cooperativas Punta Alta, Piedritas, Coronel Pringles y Lezama (Buenos Aires), y Godoy Cruz (Mendoza), Edersa (Río Negro), Energía de San Juan; Edesal (San Luis), DPE (Tierra del Fuego) y EPEN (Neuquén).

Tal como adelantó este diario, Energía también está trabajando en el lanzamiento de una licitación destinada a sumar generación eléctrica para los nodos críticos. Apunta a que esta nueva generación térmica se licite en el marco de una transición para la contractualización de energía entre privados. Con el nuevo sistema, las generadoras comprarían su propio gas sin depender de Cammesa y venderían la energía también de forma directa.

Plan de contingencia

Recientemente, el Gobierno oficializó la puesta en marcha de un plan de “Contingencia y Previsión” para los meses de verano e invierno, que atraviesen temperaturas extremas, ante la posibilidad de la escases de energía eléctrica. A través de la resolución 294/2024 publicada en el Boletín Oficial de este miércoles, se establecieron medidas para la generación, el transporte y la distribución, así como para la aceleración de trabajos pendientes, alternativas y tarifas que quiten incentivo al consumo y reduzcan la demanda.

En su artículo primero, la resolución establece la creación del “Plan de Contingencia y Previsión para meses críticos del período 2024/2026 (el Plan de Contingencia), con la finalidad de evitar, reducir o mitigar la crítica condición de abastecimiento de energía para los días críticos del mencionado período, que comprende las acciones propias que implementará la Secretaría de Energía en los segmentos de generación, transporte y distribución de energía eléctrica, conforme lo previsto en la presente resolución”.

La primera parte del texto que lleva la firma del secretario de Energía, Eduardo Chirillo, se centra en explicar las medidas para la oferta de energía, como por ejemplo “realizar todas las acciones que permitan obtener la importación de energía y potencia de los países limítrofes en horas de elevada exigencia de días críticos que oportunamente definirá Cammesa y crucialmente en horas pico”.

Además, se formula la incorporación de “un esquema de remuneración adicional, complementaria y excepcional en base a potencia disponible (remuneración fija) y generación (remuneración variable) que promueva la disponibilidad de las centrales de generación térmica en meses y horas críticas, con vigencia desde diciembre de 2024 a marzo de 2026?, por el que se “habilitará a los Agentes Generadores titulares de Centrales de Generación Térmica a adherir a un Compromiso de Disponibilidad de Potencia y Mejora de la Confiabilidad para los meses de verano e invierno”.

Por otro lado, en lo referido al transporte de la energía, se mencionan tres modificaciones. El primero de ellos se centra en “propiciar mecanismos regulatorios nuevos sobre los Procedimientos para la programación de la operación, el despacho de cargas y el cálculo de precios” con el objetivo de “fomentar las inversiones en ampliaciones de los sistemas de transporte de energía eléctrica”, que, al fin y al cabo garanticen el abastecimiento energético y otorguen seguridad al sistema.

Estos cambios estarán a cargo de la Subsecretaría de Energía, la cual deberá crear “un esquema integral de disponibilidad preventiva” con el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) y los Concesionarios de Transporte en Alta Tensión, principalmente en aquellos nodos identificados como “críticos con sobrecarga”, a fin de contar con la conexión de los transformadores de reserva cuando se requiera su uso, en los días que de extremo calor y donde la demande supere el promedio.

Asimismo, se insta al ENRE a comunicar cuáles son las medidas que se empezaron a tomar o que ya tienen un avance para palear estos escenarios en el verano para que su ejecución se complete en el menor tiempo posible.

En otro tramo de la resolución, se detalla lo referido a la distribución de la energía. En primer lugar se le solicita al ENRE que instruya a las empresas distribuidoras de jurisdicción federal para que, dentro de un plazo máximo de 15 días presenten un Programa de Atención de Contingencias ante situaciones de indisponibilidades en sus áreas de concesión.

Este programa que deberán diagramar las empresas encargadas de la distribución -en el caso de AMBA, Edesur y Edenor- tendrá que contener los siguientes apartados:

– Las acciones de mantenimiento preventivo para evitar fallos mayores y asegurar que la infraestructura existente funcione a su máxima capacidad.

– El alistamiento de medios físicos incluyendo las disponibilidades de las Unidades de Generación Móvil (UGEM), propias o contratadas, y humanos para afrontar las contingencias.

– Un centro de atención telefónica, de funcionamiento continuo, con personal apto y suficiente para atender las consultas y/o reclamos de los usuarios.

– Un esquema de atención proactiva hacia los usuarios por parte de los prestadores del servicio público de distribución, con información suficiente respecto de las condiciones del servicio y en caso de corresponder su restitución.

Por último, el plan de contingencia eléctrica implementará un mecanismo de gestión de demanda de los Grandes Usuarios Mayores (GUMAS), voluntario, programado y remunerado que permita contar con oferta de reducción de carga a precio. Es decir, que aquellas empresas y usuarios del Mercado Eléctrico Mayorista podrán acceder a beneficios de menos costo a cambio de reducciones de consumo de energía. Los detalles de este punto fueron pormenorizados en los anexos que se publicaron junto a la medida en el Boletín Oficial.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba