Alerta por brote de casos de sarampión en América: Argentina es uno de los paises afectados
Con más de 14.000 casos sospechosos en 2024 y 376 confirmados, tres naciones cuentan con el mayor número de contagios, según advirtió la Organización Panamericana de la Salud. La importancia de la vacunación para prevenir la propagación
- La OPS alertó sobre un aumento en casos de sarampión en la región, con 14.000 reportes sospechosos y 376 confirmados.
- EE. UU., Canadá y Argentina concentran la mayoría de los casos en 2024.
- La baja vacunación contribuyó al resurgimiento; la OPS insta a intensificar la inmunización y vigilancia.
Lo esencial: la Organización Panamericana de la Salud emitió una alerta epidemiológica por el incremento de casos de sarampión en las Américas. Hasta el 5 de octubre de 2024, se reportaron más de 14.000 casos sospechosos y 376 confirmados en ocho países, liderados por EE. UU. (267), Canadá (82) y Argentina (11). La OPS subrayó que el 57% de los casos confirmados no estaban vacunados. Reforzar la cobertura de vacunación es esencial para evitar brotes en una región previamente libre de sarampión endémico desde 2016.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió, en las últimas horas, una alerta epidemiológica tras un aumento de casos de sarampión en las Américas. Según advirtieron, hasta el 5 de octubre se han reportado más de 14.000 casos sospechosos en la región, con 376 confirmaciones en ocho países. Estados Unidos encabeza la lista con 267 casos, seguido de Canadá con 82 y Argentina con 11. Asimismo, indicaron que esta situación es preocupante, ya que la región que fue declarada libre de sarampión endémico en 2016.
El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta principalmente a los niños y puede provocar complicaciones severas como neumonía y encefalitis, e incluso ser mortal. En 2024, la mayoría de los casos confirmados pertenecen a menores de 1 a 9 años y adultos jóvenes de 20 a 29 años. Según la OPS, el 57% de los casos no estaban vacunados y en el 28% no se conocía el estado de vacunación. Es por eso que desde el ente instan a los países a reforzar la vacunación y la vigilancia. En Argentina, el brote de sarampión incluye 11 casos en Río Negro, algunos vinculados a viajes a Bolivia y familiares de los afectados.
Lo cierto es que esta enfermedad es una de las principales causas de muerte en niños pequeños a nivel mundial, aunque existe una vacuna eficaz y segura. La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que, hasta el 15 de octubre de 2024, más de 502.000 casos sospechosos se notificaron en 182 Estados miembros de sus seis regiones. De estos, más de 283.000 fueron confirmados, lo que representa el 56% del total.
Alerta epidemiológica de la OPS
En la alerta, que se difundió en las últimas horas, “la OPS informa que, en 2024 y hasta el 5 de octubre, se han registrado más de 14.000 casos sospechosos de sarampión, con 376 confirmaciones en ocho países de las Américas, principalmente en Estados Unidos (267 casos), Canadá (82) y Argentina (11). La mayoría de estos casos son importados o están relacionados con la importación. La región de las Américas fue certificada como libre de rubéola en 2015 y de sarampión endémico en 2016″.
Este aumento de casos importados y relacionados con la importación resalta la necesidad de un enfoque coordinado para el control de la enfermedad, especialmente en un contexto de alta movilidad y contacto internacional. Por lo cual, desde el ente sanitario advirtieron la urgencia de intensificar las campañas de vacunación y fortalecer la vigilancia epidemiológica para prevenir nuevos brotes y contener la propagación del virus, ya que la región fue certificada como libre de sarampión endémico en 2016.
De acuerdo a lo expresado por la OPS, “el grupo de edad más afectado incluye a niños de 1 a 9 años y jóvenes adultos de 20 a 29 años. El 57% de los casos confirmados no estaban vacunados y en el 28% su estado de vacunación era desconocido, lo que resalta la necesidad urgente de abordar las brechas en la cobertura de vacunación”.
De todas maneras, “aunque se ha observado un aumento en los casos desde mediados de febrero de este año, la tendencia general muestra una disminución en las semanas posteriores a partir de finales de marzo; sin embargo, se han seguido confirmando casos en los meses siguientes”.
Incluso, destacaron que “durante el año, la OPS advirtió en enero y junio sobre la disminución en las coberturas de vacunación contra el sarampión, rubéola y parotiditis (conocida como SRP o triple viral). En 2023, la cobertura regional para la primera dosis de la vacuna SRP fue del 87% y del 76% para la segunda dosis, por debajo del umbral ideal del 95% recomendado para evitar brotes”.
Lo cierto es que el descenso en la cobertura de vacunación abrió una brecha en la inmunidad de la población y facilitó la propagación del virus, especialmente en comunidades con acceso limitado a servicios de salud. Esta situación es preocupante porque el sarampión, aunque prevenible, puede causar brotes significativos si la protección comunitaria no es suficiente.
Para abordar esta crisis, la OPS ha instado a los países de la región a cerrar las brechas de inmunización y a implementar estrategias de vacunación complementarias, como campañas de inmunización dirigidas a grupos específicos y búsqueda activa de casos. Además, enfatiza la importancia de la educación y comunicación comunitaria para fomentar la aceptación de las vacunas y disipar dudas. El objetivo es no solo aumentar la cobertura, sino también garantizar que las comunidades comprendan la importancia de la vacunación como la herramienta más eficaz para protegerse contra el sarampión y otras enfermedades prevenibles.
Casos y distribución geográfica
En 2024, el resurgimiento de casos de sarampión en la región de las Américas se ha concentrado principalmente en Estados Unidos, Canadá y Argentina, países que en conjunto representan la mayoría de los 376 casos confirmados hasta el 5 de octubre. Estados Unidos lidera con 267 casos, mientras que Canadá registró 82 y Argentina 11. Esta distribución refleja un patrón preocupante de casos importados y relacionados con la importación, un desafío para una región que había alcanzado la erradicación del sarampión endémico en 2016.
En Argentina, la situación del sarampión durante 2024 ha sido motivo de atención, especialmente tras la aparición de un brote en la provincia de Río Negro. Este brote fue detectado el 4 de octubre, cuando el equipo de respuesta rápida de la provincia inició una investigación epidemiológica ante la aparición de casos sospechosos. La investigación confirmó 11 casos, de los cuales tres tenían antecedentes de viaje reciente a Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, y los otros ocho eran familiares sin historial de viaje. Las autoridades identificaron el genotipo B3 en estos casos, el cual había sido detectado previamente en Oregón, EE. UU..
Lo cierto es que desde comienzos de año, de acuerdo al Boletín Epidemiológico argentino, se confirmaron un total de 14 casos de sarampión. Además del brote en Río Negro, se registraron otros casos significativos a lo largo del año. Por ejemplo, en enero, se confirmó un caso en un niño de 19 meses sin antecedente de vacunación en Salta, y en febrero, dos casos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires: un niño de 6 años y su hermano de 13 meses, ambos sin vacunación previa.
Lo cierto es que el sarampión es conocido por su alta contagiosidad, ya que puede transmitirse fácilmente de persona a persona por vía respiratoria. La enfermedad se propaga rápidamente, sobre todo en comunidades con baja cobertura de vacunación, y los datos de 2024 lo confirman: los grupos de edad más afectados fueron los niños de 1 a 9 años y los adultos jóvenes de 20 a 29 años.
Detalles del sarampión y sus riesgos
El sarampión es una enfermedad viral extremadamente contagiosa que se transmite por el aire a través de gotículas respiratorias y afecta mayormente a los niños, aunque también puede impactar a jóvenes y adultos. Su capacidad de propagación es alta: en comunidades sin inmunización adecuada, una sola persona infectada puede contagiar a más del 90% de los individuos no vacunados a su alrededor.
Las complicaciones del sarampión pueden ser graves y potencialmente fatales. Entre las más comunes se encuentran la neumonía, que es una causa importante de mortalidad infantil asociada al sarampión, y la encefalitis, una inflamación del cerebro que puede provocar convulsiones y daños neurológicos permanentes. Otras complicaciones incluyen la diarrea intensa, infecciones de oído y, en algunos casos, ceguera.
Ante el resurgimiento del sarampión en las Américas, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha emitido una serie de recomendaciones para prevenir la expansión de la enfermedad y proteger a la población. En primer lugar, se insta a los países a fortalecer sus sistemas de vigilancia epidemiológica para una detección temprana de casos, especialmente los importados. La rápida identificación y respuesta ante casos sospechosos es crucial para contener posibles brotes y evitar su propagación a otras comunidades.
En Argentina, la vacunación es la medida de prevención recomendada para contener el sarampión, por lo cual se insta a que todas las personas a partir de los 12 meses de edad deben tener su esquema de vacunación completo de acuerdo con los lineamientos del Calendario Nacional de Vacunación.
Los niños de 12 meses a 4 años deben recibir al menos una dosis de la vacuna triple viral (SRP), mientras que los mayores de 5 años, adolescentes y adultos deben acreditar al menos dos dosis aplicadas después del primer año de vida o presentar una serología positiva para sarampión y rubéola. Las personas nacidas antes de 1965 se consideran inmunes y no necesitan vacunarse.
Para reforzar estas medidas, el Ministerio de Salud de Argentina ha instado a los equipos de salud a implementar estrategias de búsqueda activa de casos y llevar a cabo actividades de vacunación complementaria en comunidades con baja cobertura de inmunización. Además de recomendar a los viajeros que se vacunen antes de visitar zonas con brotes documentados de sarampión.