El tribunal presidido por el juez Alberto Granados, acompañado por las vocales Antonia Elisa Toledo y Claudia Zárate, condenó a Alfredo Chade a 35 años de prisión efectiva por abuso sexual infantil agravado, tras comprobarse que abusó de una menor desde los seis años y registró 973 fotos y videos de los hechos. La sentencia se conoció por videoconferencia debido a la suspensión de actividades presenciales del Tribunal Superior de Justicia por el aumento de casos de enfermedades respiratorias.
El Fiscal de Cámara Daniel Zalazar pidió los 35 años de prisión que finalmente impuso el tribunal, mientras el proceso reveló que Chade filmó y fotografió los abusos «como si fuera un trofeo», según describió el abogado querellante David Calipo durante los alegatos finales. Los registros audiovisuales evidenciaron el rechazo y resistencia de la menor, quien mantuvo un testimonio «persistente, verosímil y coherente» durante años, recordando exactamente los lugares donde ocurrieron los hechos.
