Parque Industrial de La Rioja: Más de 700 puestos de trabajo perdidos en el último Año

Juan Carlos Serrano, vicepresidente de la Unión de Industrias Riojanas (UNIR), se refirió a la crítica situación que atraviesa el sector industrial de La Rioja, afectado por diversas políticas económicas nacionales. En un contexto económico complejo, Serrano destacó las dificultades que enfrentan las empresas locales debido a la competencia desleal, la alta carga impositiva y el aumento de los costos operativos.
Según el vicepresidente de UNIR, el Gobierno Nacional ha implementado medidas que incluyen la reducción de los aranceles a la importación de productos como telas y calzados. Esto ha tenido un impacto directo sobre la industria textil local, que, a su juicio, se ve amenazada por la llegada de productos importados a precios mucho más bajos que los de producción nacional. «Lo que pedimos es poder competir con las mismas reglas», sostuvo Serrano, refiriéndose a la necesidad de una competencia justa entre los productos nacionales e importados.
Serrano explicó que, mientras que los productos importados llegan al país sin aranceles, los industriales argentinos deben afrontar altos costos de producción, lo que hace que los precios en el mercado interno sean significativamente más altos que en otros países de la región. Este desajuste afecta principalmente al sector textil, que, además, enfrenta una caída en la demanda interna.
El vicepresidente de UNIR también señaló que el sector agroindustrial ha visto un aumento considerable en los costos de producción, especialmente debido a la inflación y la devaluación. «Los precios que venden son los que el mercado internacional marca, no pueden fijar sus precios», explicó Serrano, resaltando la creciente incertidumbre que afecta a este sector vital para la economía riojana.
En cuanto al empleo en el Parque Industrial de La Rioja, Serrano reveló que la cantidad de puestos de trabajo ha disminuido considerablemente, con más de 700 puestos de trabajo perdidos solo en el último año. Estos empleos eran de alta calidad, con beneficios como paritarias, aguinaldos y capacitaciones técnicas constantes. «Un puesto de trabajo industrial perdido vale mucho», señaló, subrayando la importancia de cada empleo en un contexto económico tan desafiante.
Serrano también se refirió al impacto de la inflación y el aumento de los costos de la energía, que afectan tanto a los hogares como a las industrias. Las tarifas de electricidad han subido considerablemente, lo que se ha traducido en un incremento de los costos operativos para las empresas locales. «El incremento de los costos, junto con la caída de las ventas, está generando un estrés enorme en el sector privado», señaló.