Grupo misionero adventista dejó su huella en Chilecito

En un acto de solidaridad, empatía social y compromiso con la Fé, el grupo misionero Caleb Extremo llegó a Chilecito, con el objetivo de llevar a cabo una misión de asistencia humanitaria en la región.

El grupo, conocido por su labor en comunidades vulnerables, está conformado por un equipo multidisciplinario de voluntarios que incluye médicos, enfermeros y maestros. Todos profesantes de una Fé cristiana a toda prueba.

Su misión durante 10 días en La Rioja, marcó el inicio de una serie de actividades destinadas a mejorar la calidad de vida de los habitantes de la zona, esperanzados en la réplica de sus acciones a través de la agrupación Adventista que reside en Chilecito.

“Estamos aquí para ayudar y servir a la comunidad de Chilecito. Creemos en el poder de la colaboración y el amor, deseamos alumbrar los lugares a los que Dios nos envié siempre”: expresó Thiago Urel, Pastor y líder del grupo.

Durante su estadía, Caleb Extremo llevó a cabo de manera gratuita consultas médicas, odontológicas y actividades recreativas para niños y adolescentes. Además, entregaron alimentos e insumos médicos.

La llegada del grupo generó gran expectativa entre los residentes locales, quienes fueron manifestando su agradecimiento por el gran trabajo desinteresado que Caleb Extremo llevo a cabo. “Es un alivio saber que hay personas dispuestas a ayudarnos en momentos difíciles. Apreciamos mucho lo que están haciendo”, fue el comentario más generalizado de todas las personas a las que alcanzaron con un despliegue de gran impacto en la sociedad.

Con Chilecito como protagonista, en Anguinán visitaron a muchas familias, un orfanato y una escuela de futbol. Realizaron donaciones importantes, necesarias para el desarrollo de los chicos, material deportivo y juguetes. Además de la asistencia odontológica realizaron una serie de inspiradoras charlas espirituales.

Tuvieron espacio radial en diferentes medios del departamento, donde Marcio Barros, cantante cristiano ejecuto la guitarra y canto en su idioma.

“En el lugar que Dios nos envíe, iremos siempre” es la premisa de Caleb Extremo.

Caleb Extremo: Un legado de Fe y Solidaridad

Nacido en 2021, tras el primer sueño con el que se encontró profundamente comprometido y conmovido Thiago Urel. En una población alejada de Brasil deseaba construir un templo de material. Thiago involucró a muchos amigos, que llegaron de diferentes puntos de Brasil y lograron una importante recaudación, tras lo cual lograron construir aquel templo en poco tiempo.

Al finalizar ese proyecto, todos estaban tan comprometidos con la causa “extrema” llevada a cabo con éxito y en tiempo récord, que se conformó y consolidó el grupo con enorme pasión, motivados por el amor a Dios y prestos a transmitirlo con acciones solidarias y humanitarias con matices filantrópicos. Así nació Caleb Extremo Brasil. En este grupo se encuentran personas con diferentes profesiones, incluso un Alcalde. Todos ponen a disposición de la causa sus manos y tiempo.

Así llegó el siguiente año con otro desafío, Mozambique, África y luego el tercer desafío, en el Líbano, un lugar extremo por sí solo. Ambos destinos cambiaron sus vidas por completo tras la enorme gratitud hacia las personas que abren las puertas de su corazón y el lugar que los recibe, llevándose experiencias invaluables. “En África, construimos aulas para una escuela, la misma tenía un gran espacio hecho de lata, que albergaba 250 niños, el calor llegaba a desmayarlos. Un solo maestro atendía varios grupos de alumnos, entre 200 y 300 por aula. No vuelves igual después de ver esas carencias” expreso el líder.

Así se conformó el grupo misionero adventista, sin fines de lucro, que abastece su causa con la colaboración de diferentes entidades y personas de alto poder adquisitivo. El 90% de los donantes no pertenecen al movimiento adventista. Los integrantes del grupo Caleb solventan su propio viaje, viáticos y demás gastos, con ahorros propios.

Cada año la siguiente misión se convierte en un desafío para cada uno. No conocen limites económicos, culturales, ni idiomas que condicionen su misión. Un ejemplo de entrega a la obra más urgente del mundo, manos y corazones dispuestos a dar sin esperar nada a cambio. La filantropía y el amor de Dios son un estilo de vida para ellos.

Un impacto duradero

La labor de CALEB EXTREMO tuvo un impacto significativo en la región. Gracias a la donación de alimentos por parte de la empresa adventista Granix y al trabajo de los voluntarios, se benefició a miles de personas. Asimismo, se construyó la nave principal de un templo en Anguinán y se realizaron mejoras en diversas instalaciones comunitarias.

La solidaridad y el compromiso de CALEB EXTREMO han dejado una huella imborrable en Chilecito. Los miembros del grupo demostraron que la fe y el amor al prójimo pueden transformar vidas y construir un mundo mejor.

Efectos Concretos de la Misión

• Asistencia médica: Se brindaron consultas médicas y odontológicas a aproximadamente mil personas.

• Donaciones: Se entregaron once toneladas de galletas, material deportivo, juguetes e insumos médicos.

• Construcción: Se inició la construcción de la nave principal de un templo en Anguinán.

• Evangelismo: Se realizaron charlas espirituales y se distribuyó material de lectura cristiano.