Cómo detectar un paquete sospechoso antes de abrirlo
Acá te ofrecemos algunas claves para detectar un paquete sospechoso antes de abrirlo, de acuerdo con las recomendaciones de las agencias de seguridad de los Estados Unidos:
Señales comunes de un paquete sospechoso
Errores ortográficos o palabras mal escritas: los paquetes sospechosos, por lo general, contienen errores en los nombres o direcciones.
Demasiados sellos o marcas: el uso excesivo de sellos o marcas inusuales puede ser una señal.
Remitente o dirección desconocidos: si no conocés el remitente o la dirección es incoherente, tené precaución.
Manchas o sustancias visibles: cualquier mancha de aceite, polvo o líquidos desconocidos es un fuerte indicio de riesgo.
Empaquetado descuidado: un paquete que parece estar mal envuelto, arrugado o abultado de manera desigual puede ser sospechoso.
Cables o vibraciones: si notás cables sobresalientes o el paquete emite sonidos o vibraciones, alejate de inmediato.
Olores extraños: los paquetes sospechosos pueden desprender olores químicos o inusuales.
Aspecto abultado o desequilibrado: Si el paquete parece estar desbalanceado o presenta un bulto extraño, podría ser peligroso.
Qué hacer si te encontrás con un paquete sospechoso
Si detectás alguna de las señales anteriores, seguí estos pasos para protegerte:
Evacuá la zona: abandoná inmediatamente el paquete y evacuá a cualquier persona cercana.
Contactá a las autoridades: llamá a los servicios de emergencia para que inspeccionen el paquete.
No toques el paquete: no intentes abrirlo ni moverlo. Si es posible, tomá nota de su apariencia y otros detalles sin tocarlo.
Lavá tus manos: si estuviste en contacto con el paquete, lavate las manos y cualquier parte de la piel expuesta con agua y jabón.
Apagá los equipos electrónicos cercanos: si estás en una oficina o espacio cerrado, apaga cualquier equipo electrónico cercano para evitar riesgos mayores.