434 años de historia de La Rioja

Acompañado por Blas Ponce y una comitiva de sesenta hombres, Ramírez de Velasco logró establecer la ciudad en tierras originalmente habitadas por pueblos originarios mansos, quienes más tarde se alzaron en una sublevación en 1593 motivada por los abusos de los colonizadores. Este episodio dio origen a una de las fiestas religiosas más representativas de la provincia: el Tinkunaco, símbolo de encuentro y reconciliación, que se celebra del 31 de diciembre al 3 de enero.
Ubicada en el noroeste argentino, La Rioja limita con Catamarca, Córdoba, San Luis, San Juan y Chile. Su geografía imponente de valles, montañas y ríos es el marco de una historia de esfuerzo, resistencia y fuerte identidad colectiva.
A lo largo de los siglos, La Rioja se convirtió en sinónimo de coraje. Durante la gesta sanmartiniana, la provincia brindó un aporte fundamental con armas, recursos y hombres que participaron activamente en las campañas libertadoras. La expedición Zelada–Dávila, con la toma de Copiapó, representa una de las gestas más destacadas del patriotismo riojano en la lucha por la Independencia.
Ese espíritu combativo también se manifestó durante el proceso de organización nacional, especialmente a través de la figura del general Juan Facundo Quiroga, líder federal asesinado en 1835 en Barranca Yaco.
La Rioja sancionó su primera Constitución Provincial en 1855, y desde entonces fue reformada en varias oportunidades, adaptándose a los desafíos de cada época. La última gran reforma tuvo lugar en 2024.
Hoy, la provincia se conforma como una gran comunidad de 18 departamentos, cada uno con identidad propia, heredera de tradiciones que se remontan a los pueblos originarios y que perduran en la vida cotidiana de sus habitantes.